¿Estás planificando tu viaje con niños a Marruecos y os gustaría vivir una experiencia que vaya más allá de la clásica piscina occidental de “turismo de sol y playa”?

Entonces Marruecos es la destinación ideal para vosotros, sobre todo, si no tenéis pensado viajar muy lejos de casa; solo lo suficiente como para cambiar de aires y descubrir nuevos entornos. Es muy fácil acceder a Marruecos desde cualquier lugar de España. El punto más lejano (Barcelona) se encuentra a menos de 2 horas en avión. Desde el sur de la Península, el vuelo te tomará menos de una hora.

No obstante, tan pronto como aterricéis y piséis las tierras marroquinas, descubriréis que Marruecos es un país cuya belleza brilla con luz propia.

¿Quieres saber más sobre todo lo que Marruecos tiene que ofrecer a los niños? Entonces sigue leyendo este artículo… Y descubrirás por qué Marruecos os enamorará por igual tanto a los más mayores como a los más pequeños del hogar.

Paseo en camello en el desierto de Merzouga

Las mejores actividades para niños en Marruecos

Excursión en camello por el desierto del Sahara

No existe una actividad más representativa de la esencia marroquí que pasear sobre las dunas del Sahara sentado sobre el lomo de un camello.

Para culminar esta memorable experiencia, os recomendamos que hagáis una parada para dejar descansar a los camellos, tomar un delicioso té de menta al atardecer y cenar bajo las estrellas. El Sahara es uno de los pocos lugares del mundo donde puedes observar las estrellas sin apenas contaminación lumínica, por lo que se trata de un regalo que los más pequeños de la casa recordarán toda su vida.

Y esta es una nota aparte para los más valientes: si conseguís despertaros de madrugada para ver el sol de la mañana asomar por encima de lo más alto de una duna, viviréis juntos una experiencia que vuestros sentidos os agradecerán para siempre.

Si estas en Marrakech y deseas visitar el desierto del Sahara te invitamos a probar nuestra excursión de 4 días al desierto de Merzouga desde Marrakech o la ruta Dakar de 5 días empezando desde Marrakech

Trekking por los pueblos bereberes de las montañas del Atlas

Las montañas del Atlas ofrecen rutas de baja altitud aptas para todos los públicos. Incluso los más pequeños disfrutarán de esta experiencia, ya sea a pie o a lomos de una mula. Pasear por los exuberantes valles, repletos de olivares y nogales, o recorrer los pintorescos pueblos de la zona para observar las impresionantes vistas del Atlas son dos actividades que sí o sí deberéis realizar en vuestras vacaciones en familia a Marruecos.

Los itinerarios son flexibles, por lo que, en el caso de que vuestros pies os pidan un merecido descanso, vuestro guía bereber adaptará el ritmo de la excursión a vuestras necesidades. Si lo preferís, también podéis deteneros en una cascada local para hidrataros bajo sus refrescantes aguas. Parar en algún establecimiento que os ofrezca un delicioso tajine acompañado de pan de pita recién hecho os garantizará que afrontéis la jornada con las pilas bien recargadas.

Permite que los niños sean tu guía en la Ksar de Ait Ben Hadou

Esta «ciudad fortificada» o ksar, construida en la ladera de una colina con casas de barro, forma parte de la ‘Ruta de las 1000 Kasbahs’. Esta es una carretera espectacular donde los paisajes desérticos y áridos dan paso a exuberantes oasis.

Ait Ben Hadu es Patrimonio de la Humanidad y, en ella, se han realizado varias películas y series famosas en el lugar, como por ejemplo Gladiator, La joya del Nilo o Juego de Tronos.

Recorrido por la ciudad de Fez

La ciudad de Fez es un auténtico laberinto en cuyos rincones os encantará perderos. Si os dejáis asesorar por un guía turístico, os aseguraréis de no olvidaros de visitar sus puntos más emblemáticos, así como las partes menos concurridas del conocido mercadillo árabe.

Será en el zoco de Fez donde los más pequeños empezarán a tomar protagonismo: deja que saquen a relucir los hombres de negocios que llevan dentro para que regateen con los comerciantes locales por el souvenir que más les guste. ¡Será tan divertido para ti como para ellos!

Acampada de lujo en el desierto de Agafay

Si lo que buscáis es pasar una noche de acampada (¿conoces a algún niño al que no se le ilumine la cara al escuchar estas palabras?), solo tendréis que desplazaros al interminable desierto de Agafay, que se encuentra a solo 40 minutos de Marrakech.

Sin duda, será una de las experiencias más emblemáticas de vuestra estancia en familia en Marruecos. Podréis pasar la tarde relajándoos en la piscina o explorando el desierto (en bici o en camello) y terminaréis el día con un ostentoso banquete marroquí. La guinda del pastel será sentaros alrededor de una fogata en plena noche para contemplar un hermoso cielo despejado, antes de tumbaros a descansar en una tienda de campaña perfectamente equipada con toda clase de lujos.

Relájate en un Riad en Marrakech

Unas vacaciones en Marruecos con niños no son unas vacaciones completas sin pasar una noche en un Riad (un hotel boutique tradicional). Ocultos tras ostentosas y ornamentadas puertas, son un rincón de paz y sosiego alejado del bullicio de las calles y de los mercadillos.

La mayoría de los Riad de Marrakech ofrecen terrazas y piscinas en sus azoteas y cuentan con patios centrales tranquilos.

Déjate sorprender por la exquisita decoración con mosaicos de la habitación donde te alojes. Y, sobre todo, no te olvides de cenar o desayunar en familia en la terraza de la azotea para poder observar juntos las preciosas vistas panorámicas a los antiguos techos rosados circundantes, tan típicos de Marruecos.

Explora Essaouira

No puedes perderte Essaouira, una antigua ciudad portuguesa de la costa atlántica. Déjate deleitar por sus playas barridas por el viento y sus dunas de arena (casi) idénticas a las del Sahara, así como por los aires hippies de sus concurridas calles.

Deja que tus niños prueben el kitesurf, observad juntos los barcos pesqueros y disfrutad de la cocina más occidentalizada de Marruecos (especialmente si os habéis cansado de comer tantos tajines) en alguno de los restaurantes de la zona.

Contrata nuestra excursión a Essaouira desde Marrakech para conocer la ciudad pesquera.

Essaouira
Barcos en el puerto pesquero de Essaouira

¡Lánzate a la piscina! (literal y figuradamente) 😉

Seamos honestos: un viaje con niños no es un viaje completo si la piscina no está incluida dentro del pack. Podréis encontrar toda clase de piscinas en la costa de Essaouira, hoteles con piscina en el Alto Atlas, piscinas al lado del Sahara en Merzouga, piscinas en la azotea en pleno Marrakech y Fez… e incluso en el árido desierto de Agafay.

¿Preferís los entornos naturales? Entonces ¡no podéis dejar de lado bañaros en las aguas poco profundas de las gargantas del Todra y el Dades!

Si estabas dudando sobre si viajar a Marruecos por si no encontrabas una piscina (o mejor aún, aguas naturales) donde permitir que los niños se chapoteen libremente, ya no tenéis excusa para hacer vuestras maletas y coger el primer avión que te dirija hacia Marruecos.